El gobierno del estado de Veracruz debe establecer como objetivo principal y urgente de su Plan de Desarrollo 2019-2024 la eliminación de la pobreza extrema, que es uno de los objetivos de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible establecida por la ONU. Esa es una condición básica para lograr una gran transformación de Veracruz.

Porque Veracruz es hoy uno de los estados con mayor pobreza y marginación en el país.

2.5 millones de veracruzanos (50% de la población ocupada) se encuentra en “Pobreza extrema por ingresos”, ya que su ingreso laboral mensual no es suficiente para adquirir una canasta básica de alimentos cuyo precio es de 1,569 pesos (ya sea porque el ingreso es inferior a ese precio, ya sea porque de ese ingreso depende más de una persona). Esto hace que el estado ocupe el 6º lugar entre los estados de mayor población en pobreza.

Esta situación prevalece, aunque Veracruz es la 5ª economía estatal más grande del país, a pesar de lo cual, el valor de la riqueza por persona (PIBE per cápita) lo ubica en el 24º lugar. Es decir, aunque el monto de la riqueza que se genera en el estado es muy grande, resulta insuficiente para garantizar el bienestar de su población.

Por esto, es urgente implementar una estrategia de desarrollo que permita aumentar la riqueza que se genera año con año. Y que lo haga a una velocidad mucho mayor de lo que crece la población y en una magnitud que impida que se sigan deteriorando las condiciones de vida de los veracruzanos. Esto exige definir ambiciosamente una meta de crecimiento económico que garantice esa Gran Transformación de Veracruz.

Una meta que supere lo que ha sucedido en los últimos 13 años, durante los cuales la economía veracruzana ha registrado un crecimiento de apenas 1.7% promedio anual, mientras que la pobreza extrema por ingreso creció un 22% en ese mismo período. Si el estado sigue creciendo a ese ritmo, se requerirán 42 años para eliminar la pobreza extrema.

Para alcanzar el propósito de acabar con la pobreza extrema en los seis años de la actual administración, se requiere una estrategia que genere una dinámica de crecimiento que permita duplicar el PIBE por persona. Ya que ello permitiría duplicar el valor del ingreso laboral para que alcance un valor de 2,418 pesos por persona y eliminaría totalmente la pobreza extrema del estado (aun considerando que el precio de la canasta básica alimentaria creciera al 6% promedio anual).

Para que esto suceda se requiere que el PIBE de Veracruz crezca a una tasa de 12% promedio anual. Sin embargo, eso será prácticamente imposible que ocurra en los próximos seis años, porque el actual gobierno carece de una estrategia económica capaz de generar esa magnitud de crecimiento. Eso queda claro al revisar el Plan Veracruzano de Desarrollo 2019-2024, el cual carece de una política económica que pueda propiciar una gran transformación económica.

Al parecer, el destino de Veracruz es seguir siendo pobres.

Pero ¿es posible crecer en esa magnitud? ¿Existe una estrategia en algún estado del país que haya logrado esa dinámica de crecimiento económico?

Abordaré la respuesta a esas preguntas en mi próxima colaboración.